Miguel vive en una pequeña isla y se pasa horas y horas mirando al mar.... Se imagina que es un pez de colores nadando entre corales ¡como le gustaría ser un pez!
- Cuando sea mayor seré un pez! - dijo en voz alta....
- Yo podría convertirte en pez ahora mismo, pero a cambio tienes que hacer algo por mí.... - Contestó un anciano de pelo muy blanco y barba larga.
- ¿ Eres un mago o algo así ? - pregunta Miguel algo desconfiado.
- Algo así.... Me llamo Alegre... si te convierto en pez tendrás que encontrar algo a cambio...... si no lo encuentras no podrás volver a ser humano.
- ¿ Que es lo que tengo que encontrar ? - Pregunta el jovencito.
- Necesito que me traigas una planta marina muy especial.... es una planta que crece entre los corales, y es de color rojo .... la reconocerás porque es luminosa.
Miguel no estaba muy seguro de aceptar, si no encontrara la planta nunca más volvería a ser un chico humano, y no volvería a ver a sus padres!
- Solo tengo ocho años, soy muy pequeño para hacer algo tan difícil.....
- Lo encontrarás.... eres un muchacho muy listo. Encontrarás la planta y volverás a ser humano cuando me lo pidas. El anciano miró a Miguel ansioso...El niño pensó que en sus ojos se notaba
tristeza.
- De acuerdo, te traeré esa planta y tú me dejarás ser pez todas las tardes hasta que sea mayor.
- Solo puedo convertirte en pez una vez, tendrás que conformarte con eso.
Miguel aceptó....el anciano le cogió la cara y le miró a los ojos muy fijamente sin soltarle. El niño empezó a sentir que flotaba....se notaba muy ligero.
El anciano tenía a Miguel entre las manos convertido en pez de colores....se acercó al agua y le soltó.
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Tal y como el anciano dijo Miguel encontró la planta entre los corales y se la llevó sin entretenerse.....
Alegre se comió las hojas rojas, en unos segundos se tiró al agua convertido en un precioso delfín....
- Gracias pequeño....me has salvado de un hechizo. Ahora vuelvo a ser Alegre el delfín....es hora de que disfrutes de tu condición de pez.....
El delfín llevó a Miguel a la ciudad de las sirenas, un lugar hecho de corales, conchas y caracolas.....todo ello adornado con lindas perlas blancas y alguna negra.
Las sirenas le presentaron a un montón de peces de colores y Miguel se fue a jugar con ellos a un barco hundido....hizo muchos amigos y se lo pasó en grande siendo pez. Cogió una perla de recuerdo y Alegre le llevó de nuevo a casa.
El delfín prometió a Miguel que volvería cada año con sus amigos para verle, gracias a él había recuperado su forma original....
Miguel llegó a su casa muy contento...
- Mamá hoy me he convertido en pez....he ayudado a un anciano a ser delfín. Bueno los peces de colores no te imaginas! Y las sirenas preciosas, preciosisimas.....
- Pero ¿qué dices? ¿un pez, un delfín....sirenas? ¿Te llevaron al barco hundido?
- Mamá ¿has estado allí?
-Claro hijo....hace muchos años yo era una sirena, hasta que un día me acerqué a la orilla y conocí a tu padre que es humano. No quería decir nada por miedo a que te fueras con las sirenas para siempre.
- No entiendo nada... - dijo Miguel con la boca abierta.
- Eres medio pez medio humano hijo....podrás nadar en el fondo del mar siempre que quieras.
Miguel se sintió el mas feliz del mundo con la noticia, ahora podría ir a visitar a sus nuevos amigos todas las tardes....
Y colorín colorado.....espero que os haya gustado.
*Cuchu*
